martes, 24 de octubre de 2017

Consignas para el trabajo sobre el filme visto en clase

– Filme Hijo de Dios” de Christopher Spencer (2014).

 responder les siguientes preguntas:
                1. ¿Qué no sabías o no recordabas de la vida de Jesús?
                2. ¿Qué fue lo que más te impactó de todo lo que viste?
                3. ¿Qué aspecto de la personalidad de Jesús te gustaría poder imitar?
                4. ¿Hubo algo que no entendiste de lo proyectado en el filme?
  

   ‒ Si el trabajo es enviado por email, debe ser en archivo Word o PDF, y conteniendo el nombre del alumno y su comisión en el nombre del archivo enviado, por ejemplo: 
TP  - Juan Pérez 2D

Reflexión sobre cristianismo e islam - materiales usados en clase




Islam: sentido y creencias

Sentido

 La palabra Islām, de la raíz trilítera s-l-m, deriva del verbo árabe aslama, que significa literalmente ‘aceptar, rendirse o someterse’. Musulmán es una palabra árabe que significa «el que se somete (a Dios)». Musulmán es la persona cuyo credo religioso es el islam. La palabra árabe muslim, femenino muslima, significa «el sometido o entregado a la voluntad de Dios».

Creencias

a) Un Dios único

Así, la afirmación primera de la unicidad de
Dios está hecha inicialmente bajo forma de negación:
«No hay más Dios que Alá, y Mahoma es su
profeta» (Corán 7, 157). El musulmán creyente es el
que niega el culto a todos los ídolos: a los que Mahoma
derribó en La Meca y a todos los que renacen en

Reflexión sobre budismo y cristianismo - materiales usados en clase


Las Cuatro Nobles Verdades del Buda

1.         La vida es sufrimiento.
2.         El sufrimiento nace del deseo insatisfecho.
3.         El sufrimiento puede extinguirse, extinguiendo su causa.
4.         Para extinguir la causa del sufrimiento, debemos seguir el Noble camino óctuple… que finalmente “desemboca en la Absoluta Nada”
          



Las 10 Bienaventuranzas de Jesús

Felices los que tienen alma de pobres, porque a ellos les pertenece el Reino de los Cielos.
Felices los pacientes, porque recibirán la tierra en herencia.
Felices los afligidos, porque serán consolados.
Felices los que tienen hambre y sed de justicia, porque serán saciados.
Felices los misericordiosos, porque obtendrán misericordia.
Felices los que tienen el corazón puro, porque verán a Dios.
Felices los que trabajan por la paz, porque serán llamados hijos de Dios.
Felices los que son perseguidos por practicar la justicia, porque a ellos les pertenece el Reino de los Cielos.
Felices ustedes, cuando sean insultados y perseguidos, y cuando se los calumnie en toda forma a causa de mí.
Alégrense y regocíjense entonces, porque ustedes tendrán una gran recompensa en el cielo; de la misma manera persiguieron a los profetas que los precedieron.


El doble mandamiento de Jesús

Cuando los fariseos se enteraron de que Jesús había hecho callar a los saduceos, se reunieron en ese lugar, y uno de ellos, que era doctor de la Ley, le preguntó para ponerlo a prueba:
«Maestro, ¿cuál es el mandamiento más grande de la Ley?».
Jesús le respondió: «Amarás al Señor, tu Dios, con todo tu corazón, con toda tu alma y con todo tu espíritu. Este es el más grande y el primer mandamiento. El segundo es semejante al primero: Amarás a tu prójimo como a ti mismo. De estos dos mandamientos dependen toda la Ley y los Profetas».

Dios y el problema de la existencia del mal.

Dios y el problema de la existencia del mal.

            El problema más agudo que nos suelen presentar las personas que no creen –y también algunos creyentes– es: “Si Dios es tan bueno ¿por qué permite que pasen tantas cosas malas?”.
            La respuesta que nos da la Palabra de Dios es muy clara al respecto, y la podríamos sintetizar en las siguientes afirmaciones:
1. Dios no quiere ni causa el mal (ver Génesis 6, 5; Job 34, 10-12; Santiago 1, 12-18; Catecismo 214-221 y 309-311).
2. Dios crea un mundo ordenado y bueno (ver Génesis 1-2; Catecismo 299 y 374-379).
3. Dios crea al hombre realmente libre. Y esto es bueno (ver Deuteronomio 30, 15-20; Eclesiástico 15, 11-20; Catecismo 306-308 y 1730-1742).
4. Dios quiere que el hombre haga fructificar su libertad para el amor y la comunión (ver Mateo 5 al